Decenas de jinetes migran de vuelta a casa cada primero de noviembre, en Todos Santos Cuchumatanes, para montar en carreras de caballos y celebrar la feria del pueblo cuya celebración se extiende por una semana.
El evento central de la feria comenzó como un acto de resistencia: Cuenta la leyenda que un Mam, durante la colonia, osó robar un caballo de los españoles y cabalgarlo toda la noche durante una euforia etílica por las montañas. El traje de los Todosanteros conmemora la desobediencia civil: el rojo de los pantalones representa la sangre derramada por el rebelde, mientras que el blanco y azul de la camisa representan los espíritus de los antepasados, que viven en el cielo.
Los Mendoza, un barrio "arriba del parque", acostumbra enviar un equipo a la carrera. Conformado por siete jinetes, el equipo monta por montar: no es una competencia, no hay ganadores, los hombre buscan mostrar su valentía montando.
Una celebración que inició como un acto de rebeldía, se ha ido deformando en años recientes. Mientras más jóvenes todosanteros migran hacia Estados Unidos buscando mejores condiciones de vida, la fiesta se ha vuelto una amalgama entre tradición y colonización cultural. No es extraño ver marcas anglosajonas impregnadas en los trajes de los jinetes todosanteros.
Aquí los Mendoza y sus siete días de fiesta. Aquí el silencio acompañado por una marimba distante, aquí la fiesta de Todos Santos.
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Dozens of riders migrate back home every first of november, in Todos Santos Cuchumatanes, to ride in a horse race and celebrate the town fair which's celebration extends through the week.
The main event of the fair started as an act of defiance: The legend says that un Mam, during colonial times, dared to steal a horse from the spaniards and ride it till dawn in a drunken euforia through the mountains. The outfitt of the Todosanteros, remember the civil disobedience: the red in the pants represent the blood spilt by the rebel, while the white and blue of the shirt represent the spirits of their forefathers, that live in the sky.
Los Mendoza, a neigbhorhood "above the park", send yearly a team to the race. Made up of seven riders, the team rides for the joy: there is no competition, there are no winners, men show their courage riding.
A celebration that started as an act of rebellion, has been slowly deformed recently. While the todosantos youth migrate towards USA looking for better life conditions, the festivities have become a mix between tradition and cultural colonization. It's not strange to see american brands on the riders suits.
Here "Los Mendoza" and their seven riders. Here the silence with a distant marimba, here the festival of Todos Santos.